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Parte III

La psicocirugía revolucionaria en cámara lenta

 

Tres operaciones de efectos reversibles y una  nueva vía revolucionaria...

·      Se desvencijan las estructuras del Estado sin desmontarlos todavía. (Sistema jurídico institucional – autonomías – Corona)

·      Corrosión de las instituciones en la sociedad (Propiedad – familia – educación).

·      Transformación “lúdica” de las mentalidades. (Ambientes – costumbres – cultura y civilización).

… que conduce a una sociedad disgregada autogestionaria, sin Dios ni ley.

 

Sección tercera: La reforma de la sociedad


Capítulo 12 - final

 

Un sistema escolar autogestionario para transformar las mentalidades

 

V — Ateísmo y degradación de la enseñanza

 

1- El "Plan Maravall"

Mientras la LODE incide sobre todo en los aspectos estructurales de la educación, otras medidas socialistas modifican el propio contenido de los planes de estudio. La iniciativa más conocida en este sentido fue el llamado Plan Maravall, que ha sido justamente acusado de tener inspiración marxista y de aplicar una metodología adversa al esfuerzo y a la disciplina. Constituye además un ensayo de reforma general de la enseñanza que comentaremos más adelante.

La escuela autogestionaria

 

La escuela autogestionaria eliminará las diferencias entre quien enseña, orienta y manda, y quien aprende y obedece. En este nuevo aprendizaje espontáneo, todo tiende a ser dialogante y comunitario para erradicar una supuesta y odiada mentalidad autoritaria y antidemocrática que estaría vigente en la escuela de moldes tradicionales. Se trata de aplicar a la enseñanza la doctrina del socialismo autogestionario.

El escritor socialista Daniel Chauvey define del siguiente modo la autogestión como sistema educativo: "La autogestión pedagógica es un sistema de educación en el cual el maestro renuncia a transmitir un mensaje: los alumnos deciden los métodos y los programas de formación. En otros términos, la clase autogestionaria es como una cooperativa escolar en la cual se ‘gestiona’ no sólo un presupuesto y proyectos de ocio, sino también el conjunto de la vida cotidiana de la clase y de las actividades. En la clase autogestionaria el maestro ya no enseña. La vieja relación Enseñante-enseñado es abolida. Los pedagogos de la autogestión son, pues 'enseñantes' que renuncian a enseñar (...). En la autogestión pedagógica la oposición tradicional entre adulto y niño, entre acabado e inacabado, entre saber y no saber, entre enseñante y enseñado, esta oposición es abolida (...). En otros términos, el sistema de autogestión, de autogobierno, debe poner fin a la separación entre los que dirigen y los que ejecutan, entre gobernantes y gobernados. (…) Hay que cambiar la escuela, si se quiere cambiar verdaderamente la sociedad (...). La autogestión pedagógica (...) pretende modificar las actitudes y los comportamientos" (Daniel CHAUVEY, Autogestión, pp. 213-214).

Esta doctrina fue aceptada y aplicada en Francia por el PS renovado. Su programa anuncia: "Pero entonces, ¿cómo despertar el sentido democrático hoy anestesiado? Antes que nada por la escuela, concebida como el lugar por excelencia del aprendizaje de la autogestión" (PARTI SOCIALISTE, Projet socialiste, p. 132).

En la práctica, esta singular pedagogía conduce a disminuir la calidad de la enseñanza, a nivelar por abajo y a sacrificar generaciones enteras de estudiantes a los devaneos utópicos de los teóricos del socialismo autogestionario.

Sus efectos nocivos ya se han hecho sentir. En Francia —foco del impulso anarquista de Mayo del 68— este modelo de escuela, con sus métodos pedagógicos disgregadores, estuvo en vigor algunos años. Sin embargo, el propio gobierno socialista de Mitterrand se ha visto obligado, con disgusto, a suprimir tales cambios y a volver a los métodos clásicos, pues el desastre escolar estaba amenazando sus posibilidades electorales.

De ese modo se restablecieron en las escuelas los deberes como forma de consolidar conocimientos y se reintrodujo la disciplina escolar.

"Las utopías de 68 se han disipado", afirma un estudio sobre la educación francesa, publicado en el documentado "Comentario Sociológico" (enero-junio de 1985, pp. 95-99). Este mismo trabajo, basado en un informe del Ministerio de Educación francés sobre el deterioro de la enseñanza causado por las "utopías del 68", constata que "las víctimas principales de la inadaptación del sector primario, según el informe de abril de 1984, son los niños de categorías socio-económicas modestas".

Sobre la crisis de la enseñanza francesa, comentó Raymond Polin, presidente de la Universidad Paris-Sorbonne: "La institución escolar es hoy la víctima de un frenesí de pedagogos lanzados a teorías extravagantes, cuyos resultados se han revelado catastróficos: el maestro-amigo, la escuela-lugar-de-vida, el niño que decide lo que debe aprender, la lectura global, las nuevas matemáticas, la primacía de lo oral sobre lo escrito. Resultado: 20 por 100 de los alumnos de sexto de EGB en Francia no saben leer" (ib., p. 98).

Su puesta en práctica causó alarma en importantes sectores educativos. Así por ejemplo, la hermana Ángeles Martín, de la FERE, denunció su carácter abiertamente ateo, que favorece la decadencia de la enseñanza: "La reforma propuesta es una pura utopía: mucha teoría y en cambio no hay práctica. Los contenidos bajan. (...) En todo el texto se evita la palabra espíritu, el término conciencia. (...) En cuanto a la metodología, echamos de menos un método más concreto de conocer el hecho histórico. (...) Yo diría que parece redactado por un cerebro marxista." [42]

Del mismo modo, la directora del Colegio Medalla Milagrosa de Toledo, María Sonsoles Rodríguez, protestó enérgicamente en contra de los utópicos experimentos socialistas: "La reforma significa un gran descenso en el nivel de contenidos y se utiliza la láctica de evitar la religión, la ética. (...) Los ni­ños se lo pasan muy bien: pasean por la calle, hacen muchas excursiones..., pero no hay estudio. Personalmente no estoy por tener a las niñas de conejillos de indias." [43]

Por su parte, el director del Colegio Pálcam, de Barcelona, Antonio Cagigós Soro, manifestó preocupación con algo que es la aplicación a la enseñanza —aunque todavía parcial— del lema del Mayo francés prohibido prohibir. "El problema es que, por parte de las autoridades, se va creando el clima de que al niño no hay que exigirle, ni obligarle. El ministro insiste en que no deben encargarse deberes para casa y eso hace un daño terrible. (...) Estamos criando unos niños cómodos y mal instruidos." [44]

Hasta el P. Martín Descalzo, habitualmente cauto en sus críticas al socialismo, afirmó: "Ha caído en mis manos el largo proyecto de reforma del ciclo superior de EGB, ciento sesenta páginas que he leído con apasionado interés porque señalan los caminos que hoy están experimentando algunos colegios y que en futuro próximo se van a imponer a todos los muchachos de hoy y de mañana. (...) Ha sido barrido con minuciosa, absoluta, sistemática, terca, lastimosa y miserable atención todo lo que tenga la menor alusión, no ya a los valores religiosos, sino también a todos los espirituales. (...) Toda la visión del hombre que —muy sutilmente, eso sí— subyace en este plan es una visión que llega del materialismo marxista." [45]

 

2-  Sabotaje a la enseñanza de la religión católica

Las quejas más frecuentes de los padres de alumnos de colegios públicos se refieren al continuo sabotaje de las clases de religión por las vías de hecho.

Según el acuerdo entre el Episcopado y el Gobierno, éstas deberían tener dos horas de duración semanales. Pero, tal y como denuncia un informe de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis, "la reducción de horas semanales en todos los niveles y el postergamiento de la clase de religión a la última hora de la jornada dificultan su enseñanza." [46]

En toda España, los profesores de religión, de enseñanza media, manifestaron su temor de que el Gobierno suprima por completo las clases de religión [47].

También en otro comunicado, profesores de religión de EGB de Madrid denunciaron los extremos grotescos a que llegó el mencionado sabotaje por la vía de los hechos. Estaban dando sus clases en "pasillos, recreos (...) sin material de ningún tipo", sin respeto al "horario establecido" y se aprobaban alumnos "sin nosotros saberlo." [48]

Tales medidas niegan en la práctica los acuerdos de 1979 entre la Santa Sede y el Gobierno español, uno de los cuales establece en su artículo II:

"Los planes educativos en los niveles de Educación Preescolar, de Educación General Básica (EGB) y de Bachilléralo Unificado Polivalente (BUP) y grados de Formación Profesional correspondientes a los alumnos de las mismas edades incluirán la enseñanza de la religión católica en todos los centros de educación, en condiciones equiparables a las demás disciplinas fundamentales.”' [49]

Sobre dicho sabotaje, en sus diversos niveles, un comunicado de la propia Comisión Episcopal de Enseñanza advirtió que hay violación de los acuerdos con la Santa Sede "cuando sistemáticamente se sitúa esta enseñanza en los horarios más desfavorables; cuando se recorta el horario previsto; cuando se suprime de algún curso escolar." [50]

En el mismo sentido, la XLIII Asamblea de los obispos, reunida en noviembre de 1985, manifestó su preocupación por el hecho de que, estando acordadas con la Iglesia dos horas semanales de religión, en la práctica se estaba dando solamente una [51].

¿Modificó su actuación el Gobierno? Por lo que consta, en nada...

 

3- Reforma global del sistema educativo: tanteos e incógnitas

En la presente legislatura, la iniciativa socialista de mayor alcance será la reordenación de todo el sistema escolar no universitario. El Gobierno pretendía hacerlo por medio de una única ley, la LOSE (Ley de Ordenación del Sistema Educativo), y nada indicaba que el estilo autoritario que estuvo presente en toda la tramitación de la LODE fuese abandonado.

Sorprendentemente, meses después de anunciar la LOSE, el Ministerio de Educación prefirió una vía diferente a la seguida con la LODE, y más de acuerdo con el Tono despreocupado y sonriente adoptado por el PSOE en su estrategia:

a) No habrá una sola ley, la anunciada LOSE, sino varias, una para cada nivel escolar.

b) Antes de presentar sus proyectos de ley, el Ministerio ofreció una propuesta con tono moderado resumida en el libro Proyecto para la reforma de la enseñanza e invitó a dialogar a entidades ligadas a la educación privada, como la CECE, FERE y CONCAPA*.

 

 

* Al presentar un informe sobre el proyecto gubernamental de reforma de la Enseñanza a la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal, monseñor Delicado Baeza puso de relieve algunas de sus características:

"1. Se ignora la dimensión trascendente de la persona y apenas se atiende a sus valores éticos; 2. Se advierte la ausencia de la Religión y Moral católica: aparece mencionada como 'área optativa’ en la educación secundaria ubligatoria (...); 3.El proyecto no menciona la enseñanza privada (...); 4. Por lo que se refiere a la 'educación infantil' es preocupante el propósito de institucionalizar la separación del ambiente familiar ya desde cero a tres años" ("ABC", 20-11-1987).

Por su parte, Carmen de Alvear señaló "el olvido del sector privado, al que pertenecen 35 por 100 de los centros docentes" ("ABC", 15-11-1987).

 

c) Evitó presentar el contenido de los nuevos programas escolares —la parte más delicada de la reforma—, pues eso le obligaría a revelar la orientación ideológica y el nivel futuro de la enseñanza [52].

¿Qué habrá llevado al PSOE a cambiar la táctica en un terreno donde antes imponía su voluntad a través del rodillo parlamentario? ¿Miedo de despertar a la opinión pública? ¿O habrá sido tan sólo una táctica para desorientar y dispersar a los sectores que necesita derrotar?

De todas maneras, en su libro-propuesta, el Ministerio de Educación confiesa que las reformas educativas están coordinadas con los demás frentes de la revolución socialista, y que ha de evitarse la aceleración de un aspecto que pueda perjudicar la marcha del conjunto*.

 

* "La reforma del sistema educativo ha de entenderse estrechamente vinculada a otros procesos de innovación y cambio social en ámbitos culturales, laborales y económicos" (MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CIENCIA, Proyecto para la reforma de la enseñanza, p. 180.

 

4-  La Universidad bajo el PSOE ajusta el paso con la disgregación general de la enseñanza

También la Universidad sufre los efectos ruinosos que el utopismo reformista del PSOE viene produciendo en los otros ciclos de la educación.

 

a) Estructura autogestionaria también en la enseñanza superior.— Al subir el PSOE al Poder, la Universidad española se encontraba en un periodo crítico, marcado por la masificación (el número de estudiantes quintuplicó entre 1960 y 1975), la inflación profesional (50 por 100 de aumento entre 1975 y 1980), la disminución del nivel docente y su burocratización, etc. So pretexto de esos y otros problemas, el Gobierno del PSOE promulgó en agosto de 1983, la ley de Reforma Universitaria (LRU):

— transfirió las universidades para las comunidades autónomas;

— promovió la integración del profesorado interino en el escalafón ordinario sin oposiciones;

— creó Juntas de Gobierno en cada universidad, en las cuales incluyó, además de los profesores, delegaciones de los estudiantes y —novedad sorprendente— también empleados administrativos y servidores;

— determinó que el propio Claustro Universitario, en una proporción de hasta dos quintos estará integrado por alumnos, personal subalterno y personas ajenas a la enseñanza universitaria;

— instauró además un Consejo Social en el que el número de representantes de la comunidad académica tiene que ser siempre menor que el de los representantes sociales: dos quintos de representantes de la Junta de Gobierno, tres quintos indicados por sindicatos, asociaciones empresariales, etc., de los cuales ninguno "podrá ser miembro de la comunidad académica" (art. 14) [53].

Según Fernández de la Mora, esta estructura autogestionaria triple "abre ancha vía a la desjerarquización universitaria, lo cual es el principio de su destrucción", porque introduce “una inversión y desnaturalización del proceso pedagógico'', con una nota "demencial", como es la inclusión de trabajadores manuales, ajenos al proceso educativo, que podrán ser "llevados a intervenir en el régimen de estudios". Y advierte que aunque esta ley podrá ser objeto de "tácita derogación por el desuso", el hecho es "que el legislador desea que en la Universidad no manden los que saben." [54]

 

b) La Universidad: un parque de entretenimiento de adoles­centes desocupados.— De hecho, la Universidad se ha degradado a tal punto, que Luis García Moreno, Presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Catedráticos de Universidad (FACU) declaró que “asistimos al cierre de la Universidad”, agregando: “’preferimos verla cerrada a que sea, como ahora, un parque de entretenimiento de adolescentes de­socupados’ (…) Tanto el presidente de (a FACU como su secretario, el profesor José María Hernando Huelmo, criticaron la 'creciente burocratización y los procesos electorales continuos' que se están llevando a cabo en la Universidad, que 'imposibilitan la investigación y la enseñanza.'" [55]

 

c) Una siega de cerebros mediante la jubilación anticipada.— Una de las disposiciones más eficaces para producir esta degradación de la enseñanza universitaria fue la Ley de Medidas Urgentes para la Reforma de la Función Pública de 1984, la cual anticipa la jubilación de profesores a los 65 años, cuando la productividad intelectual y científica está en su auge. En la prensa diaria la calificaron como siendo una "ley estúpida", que produce un "despilfarro de experiencia" y una "siega prematura de cerebros." [56]

 

d) Los nuevos departamentos... un fracaso.— Finalmente, "catedráticos y profesores titulares" reunidos "para analizar la actual situación de la Universidad" han declarado que "los nuevos Departamentos, creados como consecuencia de la LRU, son un fracaso." [57]

La Ley de Reforma Universitaria (LRU), cuya inspiración doctrinal es idéntica a la de la LODE, en la medida en que sea aplicada irá produciendo sus efectos demoledores, entre los cuales destacamos:

— erosión del principio de autoridad;

— intranquilidad, disensiones y agitación académica crónicas;

— disminución de los hábitos de disciplina intelectual y degradación omnímoda de la calidad de la enseñanza.

 

VI— "Educación" sexual: ¿las escuelas transformadas en centros de corrupción moral?

 

La doctrina del PSOE sobre educación sexual es una aplicación radical del lema sorboniano prohibido prohibir. Desde el preescolar hasta la universidad, el Gobierno ha puesto en marcha todo un programa para imponerla, de acuerdo a reiteradas resoluciones congresuales del PSOE. A título de ejemplo veamos algunas experiencias pioneras en los varios niveles de educación*.

 

* Ver, por ejemplo, la resolución Mujer del 28 Congreso de mayo de 1979 (PSOE Resoluciones, 28 Congreso, p. 16) y la resolución Feminismo del 29 Congreso, de octubre de 1981 (PSOE, Resoluciones, 29 Congreso, pp. 234-235).

 

1-  La iniciación, en el preescolar, para "conocer los cuerpos y apreciar las sensaciones de placer"

En el colegio Pablo Picasso de Tarrassa (Barcelona), comenzó a aplicarse un programa de educación sexual que comienza en el preescolar, donde niños y niñas se revuelcan promiscuamente "para conocer los cuerpos y apreciar las sensaciones de placer". Termina en los últimos cursos de básica, en los que se explica todo lo referente a los métodos anticonceptivos. "Durante el programa, los niños aprenden que las relaciones sexuales son para gozar, y que si no se quiere ser padre o madre, se puede evitar". Los profesores de esta escuela consideran que su iniciativa constituye "una experiencia liberadora." [58]

 

2-  Como premios escolares, libros pornográficos

En Colmenar Viejo (Madrid), alumnos de las escuelas públicas ganadores de un concurso escolar, recibieron como premio libros pornográficos. "Al parecer, se cuenta  [en ellos] algo sobre las prácticas sexuales bajo los efectos de la droga y otras cosas por el estilo", informa la periodista Isabel Montejano en "ABC" [59].

Este premio infantil no ha sido una experiencia aislada. En Alicante, a unas alumnas de doce y trece años, que ganaron un concurso de dibujo, se les entregó como premio un libro sobre control de la natalidad, completamente pornográfico, cuyo título es "Aún no queremos ser padres". Las páginas centrales de ese libro son ocupadas por el dibujo de un órgano genital masculino. Los capítulos abordan temas tales como: “la habilidad", "el sexo para principiantes", "el lugar apropiado", etc.

El ministro de Educación, cuando fue interpelado por el diputado de la oposición Ángel Castroviejo, no se consideró "autoridad competente" para elucidar el caso y arremetió contra la "falsa moralidad de la derecha de siempre." [60]

Es decir, la educación sexual promovida por el socialismo tiene un contenido ideológico indisfrazable: substituir la moralidad católica tradicional —a la que califica, no sin insolencia, de falsa— por otra centrada en el hedonismo absoluto, que sería la verdadera. Es esto, por cierto, lo que está comenzando a enseñarse a los niños en las escuelas públicas españolas.

 

3-  Acabar con dos "mitos'': el aprecio a la virginidad y el repudio de la homosexualidad

Entre el torrente de iniciativas de este jaez, se destacan los cursillos de educación sexual para alumnos de octavo de EGB, organizados por el Ayuntamiento de Coslada y por una sociedad sexológica de Madrid. Se trató de una experiencia con 700 alumnos de 14 colegios, que formaba parte del Plan de la Juventud de 1985. La periodista de "El País", Carmen Santamaría, informa sobre una de las finalidades del cursillo, al decir que "los chicos detentaban una serie de mitos sociales de cariz reaccionario, en torno a la virginidad, la homosexualidad y la supeditación de la mujer al macho  [sic] en la pareja" [61]. Es decir, se intenta imponer una ideología sexual que sustituya los mitos de la virginidad, la honra, el pecado contra la naturaleza, etc.

Del preescolar a la Universidad

Escuela: ¿medio de corrupción moral?

La doctrina del PSOE sobre educación sexual es una aplicación del lema anárquico del mayo francés “prohibido prohibir”.

Desde el preescolar hasta la Universidad, el Gobierno ha puesto en marcha todo un programa para imponerla en España.

Los jóvenes educados y acostumbrados durante años al ambiente permisivo y degradante que el socialismo quiere imponer a todos los centros de enseñanza, ya no tendrán condiciones de preservar en el futuro las costumbres e instituciones que hicieron de España una nación católica.

"Con el apoyo del Ayuntamiento  [de Barcelona] y la Generalitat de Cataluña", fue también publicado un "libro de texto" para niños de seis a ocho años, que relata "como una pareja de hombres homosexuales conviven y educan a la hija de uno de ellos". Dicho libro ha sido promovido "en diversos foros educativos" catalanes, escuelas de verano, etc. Es oriundo de Dinamarca y fue prohibido en Inglaterra por el ministro Kenneth Baker. Pero según A. Mirabet, director de un instituto que en Barcelona se dedica a la acogida de homosexuales, "el director general de Servicios Sociales de la Generalitat, el presidente de la Comisión de Servicios Sociales de la Diputación de Barcelona y el coordinador de los Servicios Sociales del Ayuntamiento sólo tuvieron palabras de elogio para el libro". Se trata —dice Mirabet— de "un libro revolucionario, porque presenta una relación humana modélica, donde también existe el sexo, pero en donde sobre todo hay amor." [62]

 

4-  La pornografía inunda escuelas andaluzas, so pretexto de "Estado aconfesional"

La Consejería de la Educación de la Junta de Andalucía distribuyó en 1.200 escuelas andaluzas un libro llamado "Información Sexual para niños". En dicha obra figura la descripción detallada de actos sexuales y de las sensaciones que producen, incluyendo explicaciones sobre el uso de anticonceptivos, todo acompañado de las respectivas fotografías. Hay también descripciones elogiosas de comunas sexuales, fotografías de una familia cuyos miembros aparecen totalmente desnudos y en una de ellas con las caras cubiertas, para que el niño descubra "quién es el padre y la madre", etc. [63].

En la polémica que el libro suscitó, el portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz resaltó el carácter doctrinal de la difusión de esta pornografía, al decir: "Este es un debate entre los que queremos un estado aconfesional laico, y los que nos quieren devolver a un estado confesional." [64]

Los obispos del sur de España, manteniendo el clima de consenso dialogante, al criticar la distribución de dichos libros, los calificaron en comunicado oficial simplemente como "muy cuestionables (...) contrarios al mensaje cristiano y extraños a nuestra cultura". Al mismo tiempo manifestaron "respetuoso interés por la labor del Parlamento y del Gobierno autonómico" socialista y el deseo de "establecer cauces estables  [sic] de diálogo y colaboración" [65]. Poco después vino la colaboración del Parlamento andaluz: con el voto favorable de socialistas y comunistas se pronunció por la manutención de dichos textos pornográficos como material didáctico en 1.200 colegios [66].

 

5-  "Jornadas sexológicas" para adolescentes navarros que culminan en “experiencias táctiles”

En Navarra, el Ayuntamiento socialista de Pamplona subvencionó "Jornadas sexológicas" para adolescentes. En ellas "se analizaban temas específicos de la sexualidad del adolescente". Además de "debate y discusión", hubo "experiencias prácticas". El folleto "Resúmenes de Trabajo" explica que dichas experiencias fueron realizadas en "un local oscuro", y consistían en "descubrimiento táctil del propio cuerpo y de los amigos que están alrededor tuyo"; y califica la experiencia de "bastante positiva." [67]

 

6-  En La Rioja, "métodos para obtención del placer" sexual sin cargos de conciencia

La Comunidad Autónoma de La Rioja editó un "Método práctico de información sexual en el hogar, la escuela y la enseñanza". Su autor, José Luis García, es descrito como "un pionero en la labor a favor del placer que algunos llaman 'corrupción’". Dicho folleto despierta la imaginación, y contiene ilustraciones sobre el sexo "en sus diversas manifestaciones y funciones, en donde pueden ser coloreados por ¡os pequeños, pueden ser recortados, intentando poner a su alcance, desdramatizándolo, todo lo que se relaciona con el placer" [68]. "Desdramatizar" significa, evidentemente, abolir no sólo la conciencia moral como aun la distinción categórica que la Iglesia establece entre lo lícito y lo ilícito, etc. El texto ''recoge la terminología popular y describe, con bastante minuciosidad, los métodos para obtención del placer, tanto a nivel de relación como solitario." [69]

Según el autor, se trata de acabar con el "nacional-catolicismo sexofóbico" e imponer a los niños una educación sexual "progresista." [70]

Por esta publicación de educación sexual se han interesado no sólo la Consejería de Sanidad de la Rioja, sino también la Junta de Andalucía, el Gobierno vasco, la Junta de Castilla y León y numerosos ayuntamientos [71].

 

7- Ayuntamientos socialistas inauguran "talleres" sexuales para escolares

La Junta Municipal de Ciudad Lineal, en Madrid, organizó los denominados "talleres de educación sexual", consistentes —según una nota del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento— en charlas sobre temas tales como "Habilidades de comunicación y relación"; "Cómo pensamos, sentimos y actuamos en nuestra vida sexual", "¿Podemos cambiar o mejorar nuestra vida sexual?", etc. Dichos "talleres" se destinan "a los institutos del distrito y centros de enseñanza." [72]

Paralelamente, el "Taller de Estudios de Sexología", por encargo del Ayuntamiento de Madrid, editó unos cuadernos sobre sexualidad que está distribuyendo "en las juntas municipales y en los institutos y centros educativos de la ciudad". Cada cuaderno se compone de varios folletos, que tratan temas como "respuesta sexual", "roles sexuales", "falacias sexuales", "modelos sexuales", etc., etc. [73]

En Valencia, la Dirección General de la Salud de la Generalidad inició un curso de "actualización de la planificación familiar" que supone la apertura de "talleres a la sexualidad y al erotismo". Hay una parte teórica y otra práctica. El curso incluye informaciones sobre masajes, "conocimiento erótico", "las técnicas de conocimiento entre mujeres". Consta también de una "terapia de grupo" en la cual los hombres relatan sus "experiencias" y "actitudes". La Generalidad desea que los inscritos conozcan los diversos "aspectos importantes para la realización práctica del curso." [74]

 

8-  En Vascongadas, la "reeducación" sexual se basa en la promoción de la "búsqueda del placer"

Esta oleada llega a todas partes e incluye el "reciclaje" de profesores para promover la "reeducación" sexual de los niños, o sea, la sustitución de la moral católica por una nueva moral hedonista.

En Vizcaya, por ejemplo, el Centro de Planificación Familiar de Lejona está impartiendo unos Cursos de Reciclaje a los Profesores, con el fin de "promover una reeducación sexual actualizada en las escuelas". El plan es que "la educación sexual se imparta en todos los cursos" y en varias asignaturas. "Se intentará ayudar al niño y al adolescente a conocer sus órganos sexuales y zonas erógenas", además de "favorecer la toma de conciencia del rol en las conductas sexuales", así como "facilitar la comprensión del acto o actos sexuales como búsqueda de placer en sí o en el otro." [75]

 

9-  "Jóvenes y Anticonceptivos", experiencia piloto del plan nacional

Esta pedagogía sexual del PSOE desborda el ámbito escolar y se extiende al campo de la vida social, cívico-cultural, etc. Un ejemplo característico lo da la campaña denominada Jóvenes y Anticonceptivos lanzada como "experiencia piloto" en Barcelona, Valladolid, Avilés y Sevilla. La campaña se encamina a "acercar la educación sexual al colectivo juvenil" Si los resultados fueren positivos, "se pondrá enseguida en marcha el plan nacional". O sea, será como una misión que predicará la nueva moral socialista en toda España, incluso en los centros de enseñanza pública.

A fines de 1987 la Conferencia Episcopal denunció las entidades de la Administración Pública que estimulan "el vicio desde edades tempranas”

La "verdadera agresión moral" contra la infancia y la juventud que el PSOE viene llevando a cabo desde 1982, como parte esencial de su "revolución cultural", fue severamente denunciada por la Comisión Permanente del Episcopado en noviembre de 1987.

*   *   *

En un amplio y fundamentado documento, los obispos expresan "su firme repulsa" por la "educación sexual de adolescentes y jóvenes" que el Gobierno socialista promueve en "colegios públicos, centros de planificación familiar, ciclos de conferencias, semanas culturales de la juventud, campamentos, etc." y que "constituyen una verdadera agresión moral a la conciencia" de los españoles. El documento puntualiza que esta "agresión moral" —a pretexto de información sexual— se basa en una "concepción hedonista de la vida humana", inspirada "en una visión del hombre puramente materialista" y que lleva a "la anulación simple de toda norma moral". La Comisión Episcopal denuncia además que esta campaña de educación sexual enseña como norma de conducta "la mera subjetividad y el capricho (...) sin trabas de ninguna especie". Advierte, por otra parte, que “no pertenece ni al Estado, ni siquiera a los partidos políticos tratar de implantar en la sociedad una determinada concepción del hombre y de la moral por medios que supongan de hecho una presión indebida".

El documento episcopal consigna algunos ejemplos de esta acción gubernamental: "Todas las manifestaciones de la sexualidad, por el simple hecho de ser fuente de placer y de comunicación afectiva, son presentadas (...) como enriquecedoras de la personalidad humana: bien la masturbación, bien las relaciones sexuales plenas entre varón y mujer, al margen de la unión conyugal estable; bien las relaciones homosexuales. Según algunos de estos cuadernos  [cuadernos de educación sexual], ‘la sexualidad es la capacidad de dar y recibir placer, comunicación, afecto, independientemente de que se dirija a una persona del mismo sexo o del otro sexo'. En consecuencia, dirán además; 'ser homosexual, heterosexual o bisexual no establece diferencias ni imprime carácter. Es la sociedad, en todo caso, la que puede establecerlas a partir de comportamientos represivos y discriminatorios."

Cuando una sociedad adopta tales principios en el orden moral se "auto-destruye", denuncian los obispos (cfr. "Ya", 1341-1987).

*   *   *

Esta declaración del Episcopado —más categórica y clara que las anteriores— nos da esperanzas que en el futuro nuestros obispos continúen denunciando los errores socialistas. Sin embargo, respetuosamente pero con perplejidad, constatamos que en el documento no hay referencias explícitas al pecado, ni se nombra al PSOE o al Gobierno —los reales responsables por la campaña— aludiendo solamente a "algunas entidades de la Administración Pública".

El patrocinio y la organización están a cargo de los Institutos de la Mujer y de la Juventud del Ministerio de Cultura, y del Ministerio de Sanidad. Y la realización práctica a cargo de los ayuntamientos y comunidades autónomas en general. Además de la información que el programa pretende ofrecer a los jóvenes hasta los veinticinco años, se pondrán a disposición de éstos, gratuitamente, los métodos anticonceptivos [76].

La información que la campaña pretende proporcionar no pasa de una mal disimulada instigación al desenfreno sexual. Basta leer los títulos de los escritos, tales como La primera vez. El slogan de la campaña es: "No juegues con la suerte, elige tu anticonceptivo" y el contenido del folleto no es menos incitante: "masturbarse no impide disfrutar de la sexuali­dad con otras personas; al revés, así podréis comunicar mejor vuestros gustos. Se exhorta, además, a los jóvenes a que acallen sus remordimientos de conciencia: "No os sintáis culpables", dice uno de los folletos.

Uno de los responsables por la realización de esta campaña en Valladolid, Carlos Daniel Casares, se refirió a los objetivos de la misma diciendo: "El Ayuntamiento quiere de esta forma fomentar la vivencia de la sexualidad entre los jóvenes, para que vivan sus relaciones sexuales con responsabilidad y sin temor al embarazo" [77]. ¡Extraño concepto de "responsabilidad" éste, que la hace consistir en coartar el fin propio del acto sexual!

Posteriormente, folletos por el estilo continuaron siendo difundidos en las referidas cuatro ciudades, también bajo el patrocinio de los mismos órganos estatales. Ejemplo de ello son tres escritos destinados a los alumnos entre los catorce y diecisiete años, cuyo título general es La sexualidad humana. Tales publicaciones forman un compendio de moral socialista. Definen la sexualidad como "la capacidad de dar y recibir placer, comunicación, afecto, independientemente de que se dirija a una persona del mismo o del otro sexo". Se explica que cualquier persona puede ser homosexual: "Todos podemos manifestarnos en un sentido o en otro". De acuerdo con esos conceptos, hay dos "extremos", que son la "heterosexualidad exclusiva" y la "homosexualidad exclusiva. (...) En el punto medio estaría la bisexualidad". Se propone a todos la práctica de actos sexuales "con personas del mismo y del otro sexo." [78]

En los mismos folletos se elogia la masturbación como forma de "producir placer", y se califica de "absurda" la afirmación de que "masturbarse es malo".

Esta educación es impuesta a niños y jóvenes en las escuelas públicas... ¡que según la LODE debían ser santuarios de "neutralidad ideológica"!

Los padres de familia que votaron al PSOE, ¿sospechaban acaso que los socialistas favorecerían todas estas aberraciones morales? (ver recuadro arriba)

 

10-La oleada de la revolución sexual en la Universidad

Según denunció el escritor Ricardo de la Cierva, el vicerrector de Extensión Universitaria de la Universidad de Córdoba distribuyó entre los estudiantes un cuestionario sobre Actitudes y comportamiento sexual, que contiene preguntas como éstas: ¿qué es más importante para una relación sexual?; si el alumno se considera heterosexual, bisexual u homosexual; si considera que "para tener una relación sexual, es necesario que vaya acompañada del matrimonio, el amor, la amistad, la atracción u otra  [sic]"; si el alumno ya ha tenido relaciones sexuales con otra persona; a qué edad; y si la primera experiencia resultó o no satisfactoria; "cuál es el mejor momento del acto sexual", debiendo escogerse entre seis momentos po­sibles que vienen descritos; qué actitud prefieren mantener en el acto sexual; qué tipo de anticonceptivos utiliza el alumnado; si ha ejercido la prostitución alguna vez; si se masturba, y de qué manera (vienen detalladas); si toma drogas para estimularse, etc. También levanta la posibilidad de que se realicen en la Universidad de Córdoba experiencias de grupo sobre la materia [79].

En la imposibilidad de escoger una frase para destacarla de las otras, ya que todas disputan el primer puesto en inmoralidad, hemos preferido no subrayar ninguna.

Estos son algunos ejemplos, que bastan para mostrar la existencia de un plan general para hacer de la educación sexual —mejor diríamos, amoralidad total— una asignatura obligatoria en todos los niveles estudiantiles.

De ser alcanzados los objetivos de este plan, ¿quedará en la España futura algo de la inocencia infantil, de la pureza, decencia, decoro y pudor que son ornato de la juventud y condición de dignidad de la vida social?

Una vez más volverá al espíritu del lector la despreocupada afirmación del cardenal Tarancón: "Si el PSOE llegara al Poder, en la Iglesia española no pasaría nada."

 

VII — En las protestas estudiantiles: señales precursoras de un nuevo tipo humano

Las protestas estudiantiles de fines de 1986 y comienzos de 1987 tuvieron un carácter pionero que merece ser analizado; evidenciaron el objetivo revolucionario de forjar un nuevo tipo humano y un nuevo estilo de pensar y actuar.

 

1-  Profundo malestar en los medios estudiantiles

El rasgo común a todas esas protestas fue que sus participantes eran motivados mucho más por un difuso estado temperamental —sagazmente manipulado por corrientes ideológicas— que por aspiraciones precisas e ideas claras. Las movilizaciones traducían sobre todo el sentimiento generalizado de inseguridad y temor que se apoderó de innumerables jóvenes ante el futuro sin perspectivas que la sociedad en crisis les ofrece.

Sintiéndose inseguros ante el porvenir, muchos de esos jóvenes ven en la Universidad una posible tabla de salvación; porque en teoría, un título universitario facilitaría la obtención de puestos en el disputado mercado de trabajo. Así, un número cada vez mayor de adolescentes buscan ingresar en la Universidad a cualquier precio, y reclaman ingreso fácil, carrera fácil, diploma fácil... Nuestras decadentes y superpobladas Universidades —otrora célebres focos de cultura e investigación— son vistas, en esa perspectiva deprimente, como algo no muy diverso de simples agencias de empleo...

Marcadas por esta perspectiva, las protestas no tenían coloración ideológica definida, aunque la mayoría de sus líderes fuesen, como de costumbre, marxistas o marxistoides*. Las listas de reivindicaciones reflejaban esta confusión: mezclaban pedidos, algunos razonables, otros descabellados, sobre las cuestiones más dispares, llegando a presentar quejas contra hechos e instituciones que ni siquiera existían...  [80]**

 

* Hubo también otras manifestaciones estudiantiles que, aunque tuvieron algunas semejanzas con el conjunto de la agitación analizada en este apartado, deben ser vistas separadamente por sus características especiales vagamente antisocialistas.

Nos referimos a las manifestaciones universitarias de alumnos de los cursos superiores de Arquitectura e Ingeniería, contra el proyecto de ley que equiparaba las atribuciones profesionales de arquitectos e ingenieros técnicos (antiguos aparejadores y peritos) con los que hacían la carrera completa.

Reivindicaban algo que era de sentido común: que se mantuviera una situación que daba mayores atribuciones profesionales a quien había estudiado más (cfr. "El Alcázar", 15-3-1986, "Diario 16", 13-3-1986 y 20-3-1986).

A pesar de las protestas, el PSOE no cedió, y en coherencia con su doctrina igualitaria, aprobó la ley (Ley 12/1986, del 1 de abril, B.O.E. n° 79, 2-4-1986, pp. 11573-4).

 

** La llamada plataforma reivindicativa contenía puntos utópicos y disolventes como: "admisión inmediata  [a la Universidad] de todos los no admitidos en primera opción", "supresión de las leyes de acceso a la universidad", "rechazo de la selectividad". Por otra parte, exigía la radicalización de la autogestión con la "reforma progresista de la LODE" y con los "Consejos Escolares a partes ¡guales entre profesores, padres y alumnos", "normas de convivencia elaboradas a partes iguales por profesores, padres y alumnos que regulen la vida democrática de los centros". Finalmente una medida policialesca y arbitraria: "expulsión de los 'agresores fascistas' de los institutos" y una disparatada "dimisión de la Gobernadora Civil de Madrid, del responsable de seguridad ciudadana  [?] y del Consejo del Interior de la Generalidad de Cataluña  [¡sic!]" ("La Vanguardia", 11-12-1986). Este último organismo no existe.

 

2- Surge un nuevo tipo de liderazgo

Al frente de esta masa estudiantil aparecieron las figuras-símbolo de esta nueva revolución sin ideas.

Los cabecillas de la protesta no corresponden ya al modelo clásico del agitador estudiantil. En las generaciones anteriores, el líder estudiantil de cualquier tendencia reunía un conjunto de cualidades que le distinguían claramente entre sus compañeros: ser el más preparado ideológicamente, el orador más fogoso, el más audaz en la acción, el más diestro en la negociación, etc. Es decir, debía ser —o al menos parecer— un jefe nato, con cualidades de mando, ideas claras y capacidad de contagiarlas a sus seguidores.

Hoy, esto está desapareciendo; surge, en cambio, un nuevo tipo de líder: catalizador de sentimientos sin ideas, poco expresivo, y casi igual a sus liderados.

En Madrid apareció a la cabeza del movimiento estudiantil un joven desgarbado de 22 años: Juan Ignacio Ramos, estudiante del último año de Historia. Nada en él indicaba una cualidad sobresaliente. Su preocupación declarada era la de ser como "cualquier otro joven". No quería ser considerado líder, sino tan sólo "portavoz". Se declaraba marxista de ten­dencia trotskista y militaba en Jóvenes por el Socialismo, afirmando que "cualquier apoyo político será bienvenido. " [81]*

 

* Tres sindicatos reivindican la representación estudiantil.

El sindicato de estudiantes, cuyos miembros pertenecen en su mayoría a "Jóvenes por el socialismo", una disidencia de Juventudes socialistas del PSOE. Su líder principal es Juan Ignacio Ramos.

La Coordinadora de Estudiantes de Enseñanzas Medias y Universidades, cuyo dirigente es Francisco Ferrara, militante del Movimiento Comunista. A ella pertenecen agrupaciones de extrema izquierda como el Movimiento comunista, la Unión de Juventudes Comunistas, el POSI y la Liga Comunista Revolucionaria.

La Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CEAE), ligada al PSOE de donde proceden sus dirigentes.

Hay También agrupaciones menores de extrema izquierda, como el Colectivo de Estudiantes Progresistas y la Federación de Jóvenes de la Comunidad Autónoma de Madrid (cfr. "La Vanguardia", 15-2-1987).

 

3-  Un extraño símbolo para la agitación violenta

Los estudiantes universitarios dieron la espalda a esta movilización. Pero en las manifestaciones de la enseñanza media hubo muchos agitadores, que protagonizaron escenas de violencia. Lo que más interesa destacar es un aspecto pionero de esos desmanes: la entrada en escena de la demencia y de la marginalidad, como elementos de protagonismo político.

Junto a los estudiantes aparecieron delincuentes, punks, rambos, además de los ultrasur que, lado a lado con los aspirantes universitarios, en trance de furia apedreaban, quemaban y destrozaban lo que podían en una verdadera explosión anarco-temperamental, que les daba el gusto de romper por romper, de destruir por destruir, sin doctrinas ni programa [82].*

 

* En relación a los rambos y ultrasur es necesario notar que de hecho ellos rechazan los padrones de lógica y fuerza de voluntad de la generación de sus padres y actúan siguiendo sus propios impulsos instintivos. En este sentido son un afluente de la gran corriente temperamental revolucionaria que embiste contra el actual orden de cosas. Sin embargo, pasada la explosión de malestar, vuelven a ser chicos normales que tienen las siguientes características: conservan un residuo de las convicciones ideológicas de los padres, pero critican sus modos de actuar por considerarlos descafeinados; creen además que sus maneras primarias, directas y a veces brutales son más eficaces que la de sus padres para defender las instituciones. En este sentido son vagamente conservadores, aunque no tengan ideología.

 

La figura más característica en estos tumultos fue Jon Manteca, el mendigo punk y cojo que comenzó su carrera porque "le salió" [¡sic!] en una sesión espiritista que le ocurriría "algo grave". Para corroborar el oráculo se subió a un poste de alta tensión hasta llegar casi a los cables, siendo entonces bruscamente "disparado por los aires". Según narra, como resultado perdió una pierna y se rompió la cabeza. Semejante elemento —que ya cuenta en sus antecedentes el haber sido preso por blasfemar en alta voz durante un acto religioso en la basílica de la Virgen de los Desamparados en Valencia— apareció en medio de los disturbios estudiantiles ocurridos en Madrid a principios de 1987. Manifestó tener singulares dotes carismáticos que lo transformaron en símbolo de los impulsos de agresividad irracional que recorrían a las manifestaciones [83].

Muchos han depurado sus técnicas, tornándose expertos en acciones de guerrilla urbana: por ejemplo, fabrican cócteles molotov sobre la marcha, con gasolina sacada de los coches estacionados, paralizan el tráfico, bloquean teléfonos, depredan edificios, destrozan señales de tráfico, cabinas telefónicas, etc. [84]

 

4-  Cómo la revolución del PSOE estimula la rebelión estudiantil

Frente a los líderes de las agitaciones estudiantiles, el Gobierno del PSOE tomó una actitud concesiva, coherente con su política y sus metas revolucionarias; cortejó a los cabecillas de la protesta, negoció con ellos y les concedió más de lo que podría esperarse. Esta negociación —con sus vaivenes y calculados suspenses— duró casi tres meses. Hacia ella se diri­gieron los focos de la publicidad, brindando a los líderes estudiantiles una propaganda desmedida. El desconocido Juan Ignacio Ramos fue transformado en estrella de la noche a la mañana. El ministro de Educación y sus auxiliares inmediatos se turnaban para acoger y debatir diligentemente las propuestas de Ramos y sus compañeros del Sindicato de Estudiantes, alegando que "para un Gobierno de izquierda los estudiantes nunca serán adversarios, sino interlocutores" [85]. El contraste entre esta demagogia y la mala voluntad del mismo Ministerio ante las reclamaciones de otros grupos mucho más calificados —asociaciones de catedráticos, de centros educativos, de padres de alumnos, etc.— es clamoroso.

Cuando las negociaciones, que más parecían un show, culminaron con la firma de un aparatoso "acuerdo" entre el Gobierno y los cabecillas de la protesta, las reacciones fueron también características. Mientras Maravall señalaba que "no ha habido ni vencedores ni vencidos", Ramos se jactaba: "hemos ganado por K.O." [86]

*   *   *

Como hemos visto, el PSOE viene imponiendo una reforma educativa radical, que utiliza la escuela y la universidad para operar una gigantesca transformación socio-cultural revolucionaria.

El Partido Socialista muestra su intención de cambiar profundamente la mentalidad de nuestro pueblo. En efecto, tras la transformación autogestionaria de las instituciones de enseñanza —con la consiguiente implantación de una nueva estructura escolar colectivista, en la que el alumnado, los sindicatos y otras fuerzas populares intervendrán en el control y gestión de los centros— tras la desaparición por asfixia de la enseñanza privada y católica; tras la imposición de programas relativistas y anticristianos; tras la explosión, en la escuela, de fuerzas sociales marginales que integran el nuevo proletariado y tienden a moldear un tipo humano profundamente revolucionario; tras la implantación, en fin, de una educación sexual en todo el sistema de enseñanza, que lo transformará en eficaz medio de corrupción de la juventud, el Gobierno socialista tendrá en sus manos poderosos instrumentos para llevar hasta las últimas consecuencias su revolución cultural "callada" y "asombrosa".

Si el Partido Socialista llega a realizar su programa educativo en las seis legislaturas a lo largo de las cuales espera gobernarnos, habitará nuestras tierras un pueblo distinto, que poco o nada tendrá en común con el español; vivirán aquí, sin duda, nuestros hijos y nietos, pero de sus almas habrán sido borradas las huellas benditas de nuestro pasado cristiano*.

Sin dilaceraciones, en un clima optimista, distendido y lúdico —en el que nos dicen al oído insinuantes palabras como tolerancia, pluralismo, modernización, paz— el PSOE habrá realizado su revolución cultural, destinada a demoler con una radicalidad meticulosa e implacable lo que aún quede del edificio sagrado de la civilización cristiana...

 

* Un ejemplo entre muchos otros de este intento de descristianización es la oleada artificial de musulmanismo que está recorriendo España. Ver capítulo 8, III, 1-d.

 


NOTAS

 

 [42] “Epoca”, 6 a 12-5-1985

 [43] Ibídem.

 [44] Ibídem.

 [45] "ABC", 16-4-1985.

 [46] "Ya", 29-7-1986.

 [47] "Ya", 15-9-1986.

 [48] “Ya”, 11-12-1986.

 [49] Cfr. Carlos CORRAL y Lamberto de Echeverría, Los acuerdos entre la Iglesia y España, p. 792.

 [50] "Ya", 20-4-1985.

 [51] Cfr. "Comentario Sociológico", julio-diciembre de 1985, pp. 896-897.

 [52] Cfr. "ABC", 23-6-1987; 4-7-1987; "El País", 2-9-1986; "Ya", 12-6-1987.

 [53] Cfr. Gonzalo Fernández de la Mora, La Universidad in A.BELLA y otros, España diez años después de Franco, pp. 65 a 73. Ley Orgánica de 11/1983, de 25 de agosto, de Reforma Universitaria (B.O.E., 1-9-1983). Cfr. también "El País", 1-10-1985.

 [54] Cfr. Fernández de la Mora, La Universidad in ABELLA y otros, op. cit., pp. 65 a 73.

 [55] "Ya", 19-3-1987.

 [56] “Comentario Sociológico", julio-diciembre de 1986, pp. 164-165.

 [57] "ABC", 20-5-1987.

 [58] Cfr. "Comentario Sociológico", julio-diciembre de 1984, p. 132. Cfr. también carta de María Fernanda Prado in "El País", 27-10-1984.

 [59] "ABC", 2-2-1986.

 [60] "ABC", 12-4-1984.

 [61] "El País", 25-6-1985.

 [62] "El País", 30-9-1986.

 [63] "ABC", 9, 10 y 13-1-1984; "El Alcázar", 24-12-1983.

 [64] "El País", 9-2-1984.

 [65] "ABC", 13-1-1984; "Eclésia", 21-1-1984.

 [66] "El País", ed. internacional, 13-2-1984.

 [67] "ABC", 25-4-1984.

 [68] "Liberación", 10-3-1985.

 [69] "Diario 16", 11-2-1985.

 [70] "El País", 19-2-1985.

 [71] Ibídem.

 [72] “ABC”, 4-4-1987.

 [73] "El País", 20-6-1986.

 [74] "Ya", 6-3-1987.

 [75] "El Correo Español — El Pueblo Vasco", 16-1-1987.

 [76] "Tiempo", 6-10-1986; "Ya", 15-1-1987.

 [77] "El Norte de Castilla", 15-1-1987.

 [78] "ABC", 26-4-1987.       

 [79] "Ya", 16-1-1985.

 [80] Cfr. "La Vanguardia", 11-12-1986.

 [81] "El País", 13-12-1986; "Ya", 11-12-1986.

 [82] "El País", 8-2-1987.

 [83] Ibídem; "La Vanguardia", 14-3-1987.

 [84] "La Vanguardia", 12 y 14-2-1987.

 [85] "El Día", 19-2-1987.

 [86] Ibídem.