Las actividades de Getúlio Vargas reforzaron la convicción de que quería permanecer en el poder indefinidamente y que, para lograr este objetivo, pretendía acabar con el poder político y económico de San Pablo. La reacción no se hizo esperar: en 1932 estalló en San Pablo la Revolución Constitucionalista.
La Revolución de los años 30 fue para el Brasil lo que fuera para Europa la Primera Guerra Mundial: un ruptura histórica entre dos épocas. Se cierra el período de la llamada República Vieja 16 (1889-1930), y se abre la era de Getulio Vargas.
Hasta entonces el poder había sido ejercido por el eje São Paulo-Minas Gerais, esto es, por la alianza de los dos principales Estados productores del Brasil 17. Este predominio era expresado por la fórmula “café con leche” (Minas Gerais se dedicaba también a la ganadería lechera), según la cual los representantes políticos de São Paulo y de Minas se alternaban en la Presidencia de la República. El esquema no tuvo variaciones substanciales hasta 1930, cuando el Presidente saliente, Washington Luiz, indicó como su sucesor, en lugar de un candidato minero, a otro representante paulista, Julio Prestes de Albuquerque. El Estado de Minas entró entonces en coalición con el de Río Grande do Sul, haciendo causa común alrededor del nombre de Getulio Vargas 18, presidente de este último Estado desde enero de 1928. El clima de confrontación política fue agravado por el crack de la Bolsa de Nueva York y por sus repercusiones en la economía brasileña. El famoso “jueves negro” de Wall Street, el 24 de octubre de 1929, fue el detonador de la crisis financiera mundial. Esto tuvo como primer efecto la caída de las cotizaciones internacionales del café en Brasil: los ingresos de divisas extranjeras bajaron de 67 millones de libras esterlinas en 1929 a 41 millones en 1930 19. Las reservas en oro, que en septiembre de 1929 sumaban 31 millones de libras esterlinas, en agosto de 1930 bajaron a 14 millones y en diciembre del mismo año prácticamente ya no existían 20.
En esta situación de crisis, las elecciones presidenciales del 1º de marzo de 1930 fueron vencidas por Julio Prestes. Sin embargo, se creó en el país un clima de agitación popular, que hizo eclosión en el mes de octubre con un levantamiento militar. A partir de Porto Alegre, Belo Horizonte y Recife, el movimiento se extendió a todo el país. En menos de un mes el gobierno fue obligado a ceder. El Presidente Washington Luiz fue forzado a tomar el camino del exilio y, a comienzos de noviembre, Getulio Vargas fue nombrado jefe del Gobierno provisorio.
La ascensión de Vargas al poder constituyó una verdadera y cabal ruptura con el pasado, y significó un cambio sustancial del papel del Estado, que desde aquel momento pasó a actuar como agente regulador de la actividad económica del país 21. La aristocracia rural, que durante tres siglos había sido la guía de la sociedad brasileña, perdió la dirección política de la nación, siendo substituida por nuevos intereses industriales y financieros 22. La instauración de la República, en 1889, había sido una revolución política, pero había mantenido inalterada la organización social brasileña. El movimiento de 1930, en cambio, tuvo consecuencias sociales mucho más profundas 23.
Notas:
16 Sobre la “República Vieja”, cfr. JOSÉ MARIA BELLO, História da República: 1889-1954, Compañía Editora Nacional, São Paulo, 1959, 4a. ed. Un ensayo interesante, pero generalmente subestimado, es el de CHARLES MORAZÉ, Les trois âges du Brésil (A. Colin, París, 1954). Una de las críticas más profundas a la República Vieja fue hecha por un monarquista, JOSÉ MARIA DOS SANTOS, inmediatamente después de la Revolución del año 30, en su obra A política geral do Brasil (J. Magalhães, São Paulo, 1930). Otros dos estudios de carácter general que aportan importantes informaciones son los de SERTÓRIO DE CASTRO, A República que a revolução destruiu (F. Bastos, Río de Janeiro, 1932) y de DORMUND MARTINS, Da república à ditadura (Typ. São Benedicto, Río de Janeiro, 1931).
17 Desde 1906 cobra también importancia el estado de Río Grande do Sul, cuya economía no se caracterizaba por un producto único, como en el caso de São Paulo y de Minas. Mucho más débiles eran los otros 17 Estados de la Federación. Cfr. JOSEPH LOVE, Rio Grande do Sul and Brazilian Regionalism 1882-1930, University Press, Stanford, 1971; ID., A locomotiva São Paulo na Federação brasileira 1889-1937, Paz e Terra, Río de Janeiro, 1982; JOHN D. WIRTH, O fiel de balança. Minas Gerais na Federação brasileira 1889-1937, Paz e Terra, Río de Janeiro, 1982.
18 Nacido en 1883 en Río Grande do Sul, Getúlio Vargas fue diputado y ministro federal, y más tarde Presidente (Gobernador) de su Estado natal (1918-1930). Conquistó el poder en 1930 y lo ejerció de manera dictatorial hasta el 29 de octubre de 1945, cuando fue destituido por un golpe de Estado incruento. En la posguerra Vargas continuó políticamente activo. Fue senador nacional, fundó en 1946 el Partido Laborista y en 1950 fue nuevamente elegido Presidente de la República. Depuesto por un alzamiento militar en agosto de 1954, se suicidó. Su itinerario político, que culminó con la creación del Estado Novo (1937-1945) presenta muchas analogías con el de Juan Domingo Perón en Argentina (1946-1955). Sobre Vargas, cfr. entre otros THOMAS E. SKIDMORE, Brasil: de Getúlio Vargas a Castelo Branco (1930-1964), Paz e Terra, Río de Janeiro 1988; PAULO BRANDI, DORA FLAKSMAN, vocablo Vargas, in DHBB, vol. IV, pp. 3436-3505.
19 A. TRENTO, Le origini dello Stato populista. Società e politica in Brasile 1920-1945, Franco Angeli, Milán, 1986, pp. 106-107.
20 NELSON WERNECK SODRÉ, História da burguesia brasileira, Vozes, Petrópolis, 1983, p. 243.
21 A. TRENTO, Le origini dello Stato populista, cit., p. 121.
22 ROBERT J. HAVIGHURST ROBERTO MOREIRA, Society and Education in Brazil, University of Pittsburgh Press, Pittsburgh, 1919, p. 42.
23 La revolución del año 30 fue preparada por el llamado “tenientismo”, movimiento de los oficiales subalternos del ejército (los tenientes) que entre los años veinte y 1934 protagonizaron agitaciones y revueltas, culminando con el episodio de la rebelión de la columna Prestes (del nombre de su comandante Luis Carlos Prestes). Compuesta por cerca de mil hombres, dicha columna recorrió hasta febrero de 1927, cuando se internó en Bolivia, más de 25.000 kms., llevando la guerrilla a varios Estados del Brasil. 24 GUSTAVO A. SOLIMEO, 1717-1967. Rainha e Padroeira do Brasil, in “Catolicismo”, Nº 202, octubre de 1967; HAMILTON D’ÁVILA, Três episodios na história da Padroeira nacional, in “Catolicismo”, Nº 418, octubre de 1985, pp. 10-12. Cfr. también JÚLIO BRESTOLONI C.SS.R., A Senhora da Conceição Aparecida, Editora Santuario, Aparecida-São Paulo, 1984.