Revolución y Contra-Revolución presenta, ante todo, un cuadro de nuestra época que se resume en una palabra dramáticamente actual hoy en día: crisis 46.
“Las muchas crisis que conmueven el mundo de hoy —del Estado, de la familia, de la economía, de la cultura, etc.— no constituyen sino múltiples aspectos de una sola crisis fundamental, que tiene como campo de acción al propio hombre. En otros términos, esas crisis tienen su raíz en los problemas del alma más profundos, de donde se extienden a todos los aspectos de la personalidad del hombre contemporáneo y a todas sus actividades” 47.
Por lo tanto, en el centro de la obra del Dr. Plinio está el hombre, criatura racional compuesta de alma y cuerpo, víctima hoy de una crisis profunda.
Aunque muchos son los factores que configuran dicha crisis, ella conserva siempre cinco caracteres esenciales:
1. es universal, pues no existe pueblo que no haya sido afectado por ella en mayor o menor medida.
2. es una, en el sentido que no existe una pluralidad de crisis autónomas, sin nexo entre sí, sino que una misma crisis afecta hoy al conjunto de lo que en el pasado fue la Cristiandad.
3. es total, porque se desenvuelve en una zona de problemas tan profunda que se extiende a todas las potencias del alma y a todos los campos de acción del hombre.
4. es dominante, porque ella es como una reina que guía fuerzas y acontecimientos aparentemente caóticos.
5. es un proceso, esto es, un largo sistema de causas y de efectos, nacidos en las zonas más profundas del alma y de la cultura occidental, que desde el siglo XV hasta nuestros días van produciendo sucesivas convulsiones.
Notas:
46 “En nuestros días —afirmó Juan Pablo II en Santo Domingo, el 12 de octubre de 1992— se percibe una crisis cultural de proporciones insospechables. Por cierto el sustrato cultural de hoy presenta un buen número de valores positivos, muchos de ellos fruto de la evangelización; pero al mismo tiempo eliminó valores religiosos fundamentales e introdujo concepciones engañosas, que no son aceptables desde el punto de vista cristiano” (JUAN PABLO II, Discurso Nueva evangelización, Promoción humana, Cultura cristiana. Jesucristo ayer, hoy y siempre del 12 de octubre de 1992, in suppl. de “L’Osservatore Romano” Nº 238, 14 de octubre de 1992, IV, pp. 21-22).
47 PLINIO CORRÊA DE OLIVEIRA, Revolución y Contra-Revolución, cit., p. 37.